martes, 29 de enero de 2013

DEL NUMERO DE COMBATIENTES.- ADRIEN LOUBIER

Artículo del señor Adrien Loubier tomado de la revista "Sous la Bannière N° 164 Noviembre-Diciembre de 2012.
Visto en Un évêque s'est levé



Los libros del antiguo testamento contienen numerosas lecciones apropiadas para aclarar el presente y el futuro, discerniéndose el dedo de Dios en la conducta de los sucesos actuales.
Algunas de estas lecciones, por su sentido místico o por su sentido alegórico, ¿no parecen escritas para nosotros en estos días de abandono, de pérdida de la fe, de enfriamiento de la caridad, de traición?

Siete mil hombres en Israel

Ante el estado en que está la piedad, ¿cuántos entre nuestros obispos, nuestros sacerdotes, nuestros religiosos, nuestras religiosas, nuestros fieles… Cuántos estarán tentados por el desaliento que hirió al profeta Elías quien sentándose bajo un enebro exclamó: “Básteme ya, Señor, de vivir, llévate mi alma pues no soy de mejor condición que mis padres”.   Y tenía razones para su desaliento, ¡incluso para un gigante entre los profetas como lo es Elías!

Elías responde a Yahvé: “Me abraso de celo, ¡Oh Señor, Dios de los ejércitos! Porque los hijos de Israel han abandonado tu Alianza, han destruido tus altares, han pasado a cuchillo tus profetas; he quedado yo solo y me buscan para quitarme la vida”.
A continuación Yahvé expresa a Elías el castigo que le ha reservado a Israel y sin embargo, en plena apostasía generalizada, en pleno abandono de la Alianza con su Dios, mientras el pueblo le da la espalda a Yahvé para adorar los ídolos de los paganos (¡creeríamos estar en el 2012!), al punto que Yahvé debe hablar directamente a Elías para darle el valor de actuar:

¿Qué dijo Yahvé?
“Mas Yo me reservaré en Israel siete mil hombres que nunca doblaron su rodilla ante Baal, ninguno de los cuales ha besado su mano”.

Por lo tanto todavía tenía siete mil hombres.
Siete mil que no habían doblado la rodilla ante Baal.

¿Tendrá esos siete mil en el 2012?

Hiere al pastor. Vela sobre las ovejas.

El Buen Pastor ha sido entregado por “los pobres de mi grey” por los 30 denarios de plata arrojados al suelo. Así profetiza el libro de Zacarías. Pero también está el mal pastor, aquél que suscitará la indocilidad de la grey.

Dice Yahvé: “Porque he aquí que yo levantaré en la tierra un pastor que no visitará las ovejas abandonadas, ni buscará a las descarriadas, no sanará a las enfermas...”
“¡Ay del pastor inútil que abandona el rebaño!”

¿No hemos visto ya de esos pastores inútiles antes, durante y después del concilio que hicieron para dispersar el rebaño?

¡Su juicio pertenece a Dios! Pero a nosotros, los pequeños, el rebaño, se dirige indudablemente este oráculo: ¡Oh espada! Desenváinate contra mi pastor y contra el varón unido conmigo, dice el Señor de los Ejércitos, hiere al pastor y serán dispersadas las ovejas; y extenderé mi mano sobre los pequeños (…) Y yo los purificaré como se purifica el oro. Ellos invocarán mi nombre y Yo los escucharé propicio”.

¿Ha llegado ese tiempo de “los pequeños”?

En Menzingen, ¿están preocupados por el “rebaño que se pierde” en los acuerdos que están preparando? ¿Buscan reunir a los que han sido “dispersados”?, ¿a curar a los que están “heridos”?

O bien, ¿dividen aún más al pequeño rebaño reunido en la obra de Monseñor Lefebvre?

Pero Dios extenderá su mano sobre los pequeños. Si le somos fieles, si no doblamos la rodilla ante los Baals del mundo pagano (y Dios sabe que son legiones), y si consentimos con todo nuestro corazón a ser “purificados” en el fuego de la prueba “como se purifica el oro”.

Este pueblo es todavía muy numeroso

En mi juventud, en la Ciudad Católica, escuché muchas veces a Jean Ousset profesar la teoría de los “mil”. El esperaba constituir una élite de  mil personas fuertemente preparadas por la oración, los retiros, la doctrina, en el combate de la Contrarrevolución. ¿Podría esperar en Francia y en la Europa Católica, restaurar el Reino Social y Político de Cristo Rey?

Pero el concilio, y miles de malos pastores infiltrados por las sociedades judeo-masónicas, pasaron sobre estas esperanzas como un tsunami devastador.

Esta gente es demasiado numerosa” dijo el Señor a Gedeón, juez de Israel frente al incontable ejército de los madianitas.

“Mucha gente tienes contigo: no será Madián entregado a manos de ella para que no se gloríe contra mí Israel y diga: Mi valor me ha libertado.

Y Gedeón, por órdenes de Yahvé, hizo pregonar: El que sea medroso y cobarde que se vuelva.

22,000 se fueron, y no quedaron mas que 10,000.

Y Yahvé dijo a Gedeón: Esta gente aún es muy numerosa, guíalos al agua que allí los seleccionaré.´

Y de esta selección, Yahvé no escogió mas que 300.
Y es con esta tropa, humanamente insignificante, que Gedeón, obedeciendo a Dios, dispersó el inmenso ejército de Madián.

En nuestros días funestos ¿Quiénes serán los 300 combatientes prestos a resistir contra el mundo y contra la apostasía de Roma, en la fidelidad de la fe de siempre y servir hasta el final a Nuestro Señor Jesucristo contra los poderes de las tinieblas, que sólo Dios puede vencer?

Que Cristo Rey nos dé la fuerza. Y que la Santísima Virgen, terrible como un ejército ordenado en batalla nos asista en las horas terribles que vienen. Y si es necesario, a la hora del martirio…

Buitres y águilas

¿Qué nos dice el Nuevo Testamento?
Las traducciones propuestas es los misales de los fieles ¿son susceptibles de iluminarlos?

Por ejemplo, si yo leo en el Misal de dom Gaspard Lefebvre traducido por el canónigo Osty en su edición de 1953, recomendado por el cardenal Lienart, padre de los padres conciliares 10 años más tarde y quien fue masón de alto grado.

Pues bien, en este Misal, en el Evangelio del domingo 24 y último después de Pentecostés (Mt. 24, 15-35) leemos:

En tal tiempo, si alguno os dice: El Cristo está aquí o allí, no le creáis. Porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas

“Así, aunque os digan: Está en el desierto, no vayáis allá, o bien: Mirad que esté en la parte más interior de la casa, no lo creáis. Porque como el relámpago sale del Oriente… y conocemos bien lo que sigue.

Pero algunas líneas más abajo encontramos esta frase sorprendente:

Y allí donde se encontrare el cadáver, allí se juntarán los buitres”

Es normal que los buitres, que son carroñeros, se junten alrededor de un cadáver. .. ¿Pero qué hacen los buitres y el cadáver en el texto que precede?

“Ubicumque fuerit corpus, illic congregabuntur et aquilae”.

Esto cambia todo, y me obliga a decir que por lo menos esta traducción del canónigo Osty es por lo menos viciosa e impropia, ya  que cualquier latinista dirá que:
Aquilae no se traduce como buitre sino como águila. La cual no es carroñera, sino una poderosa ave de presa que caza animales vivos y los mata antes de comerlos.
En cuanto a corpus no se traduce como cadáver, sino como cuerpo: “Hoc est enim Corpus meum” dice el sacerdote en la consagración. No dice “este es mi cadáver”.
Ubicumque no se traduce como “allí” sino “donde quiera”.

Por lo tanto, la verdadera traducción es esta:
“Y donde quiera que se hallare el cuerpo, allí se juntarán las águilas”.

Esta simple frase tiene un sentido que concuerda maravillosamente al texto de San Mateo que le precede, también está llena de simbolismo que esclarece su sentido místico.

Porque el águila, la más grande de las aves, que puede volar muy alto y está dotada de una vista particularmente penetrante. Ella es, si le creemos a los antiguos, especialmente a los griegos, el único ser vivo cuya vista puede mirar al sol directamente. Y esto ¿no es justamente un símbolo de Cristo?

Los antiguos decían también que el joven aguilucho es obligado por sus padres a mirar de frente al sol. Y que si el aguilucho no lo lograba, sus padres lo mataban.
¿Realidad o leyenda? No tengo yo capacidad de juzgar, pero sin duda tiene un simbolismo muy interesante.

Porque antes de que el Cristo aparezca como el relámpago que sale del Oriente y se deja ver en el Occidente, debe creerse que los desiertos o en los lugares más interiores de la casa rebozarán de falsos profetas y de falsos Cristos, y que, en la confusión que precederá (en la cual estamos ya probablemente) se necesitarán buenos ojos, una buena vista, un juicio justo y esclarecido para saber donde estará el “Corpus Christi”…
Entonces nosotros, los pequeños, los polluelos que no volamos muy alto y no vemos muy lejos, aprendamos a localizar a las águilas, y sigámoslas a donde ellas se junten.
¡Pero no tomemos a los buitres por águilas!

Y oremos a la Divina Providencia para que, una vez que caiga el pastor, “extienda su mano sobre los pequeños”, sobre nosotros los pequeños y que nos otorgue las gracias necesarias para soportar las pruebas que nos reserva.

¿Osaré avanzar a otra cuestión?

Porque el texto dice “Ubicumque fuerit corpus”: “Donde quiera que se encuentre el cuerpo.

¿Y dónde se encontrará? ¿No es en dónde todavía se celebra el Santo Sacrificio de la Misa, celebrada por sacerdotes fieles?” “Hoc est enim corpus meum”.

Y aquéllos que se junten (se congreguen) si no son todos águilas, sacerdotes y fieles, son por lo menos de esos “pequeños” sobre los cuales Dios “extiende su Mano”. Ellos se han congregado en donde está realmente presente el Cuerpo de Cristo, su Dios y su Rey…

“Ubicumque” Donde quiera que él esté, allí se congregarán los fieles… no solamente en un solo lugar, sino donde quiera que Él se encuentre.

El combate de los buitres y las águilas

¿No vemos la “abominación de la desolación anunciada por el profeta Daniel establecida en el lugar Santo”? (Mat. XXIV-15)

La misma Roma está ocupada. Según dijo el exorcista del Vaticano, en el interior de sus edificios se llevan a cabo ceremonias satanistas. Y por pequeño que sea este estado, es un hervidero de logias masónicas.

Roma está ocupada por los falsos profetas y los falsos cristos de la iglesia salidos del funesto concilio Vaticano II, que reúne a la asamblea de buitres sobre un cadáver, el cuerpo de la Iglesia bimilenaria, pero moribunda por las múltiples herejías que el “modernismo hizo correr por sus venas” según la expresión de San Pio X; moribunda también por la peste del liberalismo que ha invadido las mentalidades.

Antes del Vaticano II ¿no estaba todavía floreciente la Iglesia Católica? ¿No estaban llenas las iglesias? ¿no estaban llenos también los conventos y los seminarios?
“Pero esta gente era todavía muy numerosa”. Si hubieran restaurado la Cristiandad “se hubiera gloriado” diciendo: Mi valor me ha libertado.

Entonces pasó el tornado del Concilio y los falsos profetas, como buitres, se disputan los restos del cadáver, las tropas son desbandadas: las iglesias se vacían, los presbiterios y los conventos también.

Las águilas han volado

Pero un pequeño resto resistió (imagen, quizá de los 7000 hombres cuando Elías), que no doblaron la rodilla ante los Baals del modernismo y no besaron su mano.
Expulsados de sus propios presbiterios y de sus Iglesias, echados a la calle como perros, una pequeña falange de sacerdotes apoyados por dos obispos, sostenidos por numerosos fieles, pudieron reconstruir algo. Luego le entregaron sus hermosas almas a Dios dejándonos cuatro obispos y su milicia de sacerdotes todavía fieles.

En esta ocasión pudimos observar que es alrededor del Cuerpo de Nuestro Señor, realmente presente en el Santo Sacrificio de la Misa que se reunieron por donde quiera en todo el mundo las Águilas con su mirada sobrenatural penetrante y siguiéndolas nosotros los fieles, los polluelos.

Es en torno a la Santa Misa, la verdadera, en reacción contra los nuevos ritos  elaborados minuciosamente por los buitres del Vaticano II, que se cristalizó este movimiento al que llamamos Tradición.

Contra viento y marea, apoyados con la generosidad de los fieles, esta reacción contempló la apertura de seminarios, conventos, escuelas, iglesias; células de cristiandad en donde todavía se celebra el Santo Sacrificio en casi todas partes del mundo.
¡Pero cuidado con el orgullo! ¡No nos atribuyamos las gracias que la Divina Providencia nos ha otorgado! Porque podría decir de nuevo: Esta gente todavía es muy numerosa.

¿Y entonces? ¿No estamos viendo florecer las adhesiones de todas clases de las cuales hemos hecho ya el triste inventario?

Adhesión que el actual déspota de Menzingen se apresura a organizar haciendo una nueva selección en las filas de la Tradición traicionando la obra de Monseñor Lefebvre.
¡Por el honor (¿o el deshonor?) de una Prelatura Personal.

¿Será cómplice Monseñor Fellay de los buitres que participan en el macabro festín del concilio de los falsos profetas?

En cualquier caso, acaba de inaugurar la cacería de las Águilas cazando la obra de Monseñor Lefebvre, sus mejores sacerdotes, los anti-liberales y haciendo callar a dos de sus obispos bajo pretextos lamentables.

La selección del núcleo dirigente

Ahora, bajo la triste dirección de Monseñor Fellay asistido por el abogado Krah y sus finanzas internacionales, la FSSPX, bastión de la Tradición, se ha convertido en un “grupo reductor” cuyo motor se ha vuelto una falsa fraternidad cristalizada por una obediencia incondicional a quien ejerce el poder, en vez de cristalizarse en torno a la Fe, la Verdad, la Santa Misa donde se encuentra el Cuerpo de Cristo quien es el Camino, la Verdad y la Vida.

Y así se opera la selección.

He aquí que Monseñor Tissier, en ciclo de conferencias por América se vio reducido al silencio y reconducido a su avión por un simple sacerdote.

¡Qué escándalo!

Y he aquí como el déspota de Menzingen expulsa de la Fraternidad a Monseñor Williamson bajo pretextos que ocasionarían risa si no fueran tan trágicos.

Y así, nuestro déspota tiene la osadía de invocar el Derecho Canónico para esta expulsión. Él, que ejerce su despotismo sobre una congregación que no descansa sobre ningún estatuto canónico, que fue fundada por un Arzobispo excomulgado de la Iglesia conciliar: Monseñor Lefebvre, ¡cuya excomunión no ha sido levantada!
Además Monseñor Fellay omitió verificar el texto del derecho canónico que invoca.
Porque precisamente éste excluye de la obediencia a las órdenes de la Congregación, al obispo salido de ésta, siempre que actúe  en tanto que obispo.

Canon 705 (1983): El religioso elevado al episcopado sigue siendo miembro de su instituto, pero, por el voto de obediencia, está sometido exclusivamente al Romano Pontífice, y no le obligan aquellos deberes que él mismo juzgue prudentemente como incompatibles con su condición.

Pero Monseñor Fellay se burla del derecho canónico y actúa con total arbitrariedad.
Poco le importó echar a la calle a un Obispo, ya que esto le abrió de par en par las puertas que hasta entonces apenas estaban entreabiertas, para llegar al acuerdo práctico sin acuerdo doctrinal con la Roma de Benedicto XVI.

1793-1970.- La historia se repite

La selección que se está llevando a cabo bajo el despotismo de Menzingen, no deja de recordarnos el terror de 1793 (sin las guillotinas), o el de los años después del concilio cuando se lanzaba a la calle a los sacerdotes refractarios a nueva misa.

En ese entonces había que aprender a tirar sobre los gendarmes, esconder a los sacerdotes en los graneros, vigilar durante la Misa en el bosque o en las granjas…

Y en los años 70, expulsados de las iglesias, organizar las Misas en el garaje, luego en capillas improvisadas, tratar de recuperar las iglesias desafectadas, a veces tomarlas por la fuerza, y por todas partes, hacer colecta de donaciones, legados, para alimentar a los sacerdotes fieles, para construir conventos, seminarios, escuelas.

Si el triste proyecto de Monseñor Fellay tiene éxito, todo esto regresará a las garras de la Roma apóstata… y todo empezará de nuevo

¿Todo? O casi…

Porque un buen número de células, de capillas privadas, de comunidades fieles, escaparon de las manos de los traidores y permanecen en una preciosa independencia. .. que hay que mantener a cualquier precio, como refugios , lugares de acogida, lugares fijos en la tormenta.

Y la necesidad de multiplicar estos nidos de los insurgentes ya es percibida por muchos de nosotros. Les ofrezco el extracto de una carta recibida entre otras muchas en estos tiempos que corren, cuyo remitente no lo publico para evitar la persecución de la KGB Menzingen:

Desde el pasado mes de mayo, no ponemos en la limosna mas que moneditas (para la electricidad) y la diferencia de lo que antes aportábamos la ponemos en una “alcancía”, y porque pronto nos echarán a la calle esos acuerdistas liberales, hay que buscar construir sobre bases sólidas para permanecer siempre fieles a la verdadera fe. Otros fieles de la tradición han tenido más olfato y han empezado su “alcancía” desde el levantamiento de las “excomuniones” que no incluyeron ni a Monseñor Lefebvre ni a Monseñor De Castro Mayer.

Desgraciadamente, la gran mayoría de fieles no responden todavía a esta sabia previsión sino que se encuentran en el caso de otra carta que cito a continuación:
Ciertamente son gente honesta, pero como dijo don Sardá y Salvani en “el liberalismo es un pecado”, ellos están manchados de liberalismo. O son simplemente liberales: Estilo: velero, convertible, y “tengo a mis hijos en escuela pública” o mejor: jefe de empresa que vota por Sarkozy “porque es mejor por los impuestos”, o en la propia familia, la Misa Dominical corta y tarde… además apoyamos a Monseñor Fellay. Es triste decirlo pero muchas de las personas que son fieles a la Tradición se han instalado en un pequeño confort con las capillas y los colegios y ya no estudian los buenos principios, sobre todo en política. Se dejan absorber, sin defensa, por la sociedad podrida y todos están prestos al acuerdo.

Recordemos nosotros, los pequeños, los polluelos, de seguir a la Águilas y sostenerlas. Con prudencia.

Porque, si por ejemplo Monseñor Williamson ahora está más libre en sus movimientos que cuando estaba metido en el clóset mas o menos confortable donde se le tenía encerrado (mientras espiaban su menor salida para encontrar un pretexto para expulsarlo para complacer a Benedicto XVI), la KGB-Menzingen no dejará de espiar asiduamente sus menores apariciones para continuar con la depuración de los opositores antiacuerdistas.

En cuanto a Monseñor Tissier de Mallerais, él piensa demasiado para agradar a la KGB-Menzingen, mientras que todos saben lo que él piensa.

¿Se callará mucho tiempo antes de sufrir el mismo destino que Monseñor Williamson?
En cuanto a Monseñor de Galarreta, que parece haberse inclinado ante la KGB-Menzingen, ¿no actuará jamás?

Él que decía hace poco tiempo: “Lo que cuenta es la defensa de la fe”. ¿Firmará un “acuerdo práctico sin acuerdo doctrinal”?

Otras voces se levantan

Terminando estas líneas, debo mencionar un artículo de Jerome Bourbon en el periódico Rivarol del 2 de noviembre de 2012.

Invito a todos mis lectores a procurarse este artículo y leerlo. Muy bien informado, bien escrito, manifiesta una lucidez que nos reconforta.

Además, un sacerdote del distrito (anónimo, por supuesto, por causa de la KGB) con fecha del 28 de octubre pasado, en la fecha de Cristo Rey, publicó un artículo bajo el título:

“Respuesta al Padre Schmidberger”. Merece ser citado aquí. No conozco a su autor por lo que no puedo pedirle su autorización para reproducirlo. Pero como es público y está disponible en internet, quisiera darlo a conocer a mis lectores que no son “internautas” (aunque son mucho más numerosos de lo que se cree).

“En un Comunicado a los amigos y benefactores del 26 de octubre de 2012, usted pretende que la expulsión de Monseñor Williamson es “el resultado de una evolución que dura ya algunos años”. Ella sería producto de una “antipatía” por el consejo general que se ha transformado en una “rebelión abierta”.Padre, ¡usted es deshonesto! El 13 de febrero de 2012, a un periodista de « Die Welt » que le preguntaba “El Papa ha declarado que el no hubiera aprobado el levantamiento de la excomunión de sus cuatro obispos, si él hubiera sido informado previamente de las declaraciones de Monseñor Williamson. ¿Cuál será el provenir de Monseñor Williamson después de una eventual reintegración de la Fraternidad?” Usted respondió: “Yo no soy profeta, pero en un contexto tan importante como el establecimiento de una estructura canónica para nuestra Fraternidad, yo pienso que las conversaciones se prolongarían muy probablemente en algunas sesiones y que se hablaría de Monseñor Williamson. Además, debemos también esperar que él  respete las decisiones del superior general.”Usted no es profeta pero usted está muy bien ubicado para saber lo que quiere Monseñor Fellay y usted mismo. Ustedes quieren un acuerdo con Roma y para eso ustedes están prestos a satisfacer las exigencias del sionismo internacional y las de la Iglesia Conciliar que le está sujeta. En la misma entrevista, usted dice: “Nosotros renunciamos a la relativa libertad a la que hasta ahora hemos recurrido para la proyección internacional de nuestra obra, y la ponemos entre las manos del papa.” Mientras que Monseñor Lefebvre pedía a nuestros obispos de “depositar la gracia de su episcopado” en “un sucesor de Pedro perfectamente católico” (Mgr. Lefebvre, 29 de agosto de 1987).¿Benedicto XVI es el « sucesor de Pedro perfectamente católico”? El que es también el jefe de la “Roma modernista y liberal, que continúa su obra destructiva del Reino de Nuestro Señor como lo probó en Asís (III), confirmando las tesis liberales del Vaticano II sobre la libertad religiosa”? (Mgr. Lefebvre, carta del 29 de agosto de 1987)
Como Monseñor Williamson estorbaba sus planes inicuos y la funesta propaganda sionista, usted, y Monseñor Fellay, pensaron que había que terminarlo: O Monseñor Williamson acepta enterrarse vivo o será expulsado bajo pretextos disciplinarios.Usted cita también una declaración privada de Monseñor Williamson que no estaba destinada a hacerse pública, donde el decano de los Obispos habló de “deshacerse de Monseñor Fellay” y “de su banda”. Como usted hace referencia a Monseñor Lefebvre cuando pidió a los futuros obispos “permanecer unidos bajo la dirección del Superior General”. Pero dentro de su ceguera o deshonestidad, usted omite citar el pasaje completo para calumniar mejor a Monseñor Williamson acusándolo de haber insultado al superior. Este es el pasaje en cuestión: “En fin, os conjuro a permanecer profundamente unidos a la Fraternidad de San Pío X, a permanecer profundamente unidos entre vosotros, sometidos a su Superior General, en la Fe Católica de siempre, acordándose de esta palabra de San Pablo a los Gálatas (c. I, vers. 8 y 9): “Aún si nosotros o un ángel del Cielo os anunciara un evangelio distinto del que os anunciamos, sea anatema. Como ya os lo dijimos, os lo volvemos a decir: si alguien os anunciara un evangelio distinto del que recibísteis, sea anatema”. (Mgr. Lefebvre, carta del 29 de agosto de 1987)
La sumisión al Superior General es « en la Fe católica de siempre”. Como usted y Monseñor Fellay quieren ponernos bajo la autoridad de un papa que peca gravemente contra la fe, entonces “anathema sit”! Lo que se puede traducir por: separémonos o “deshagámonos de Monseñor Fellay y su banda”. Eso no tiene nada de injurioso.A pesar de numerosos consejos, de exhortaciones amistosas y de advertencias, Monseñor Fellay y su banda no han querido modificar su comportamiento suicida. Monseñor Williamson tenía que hablar.Padre, usted es tan deshonesto que, en este año 2012, usted escribió a los tres obispos, alentado por Monseñor Fellay, una carta en donde usted justifica en doce puntos las “razones” para concluir un acuerdo con esas personas con las que estamos en desacuerdo. Las respuestas que usted recibió, las tres a su manera, destruyeron colmadamente el fondo de sus pseudo-argumentos acuerdistas. Publíquelas para que su terquedad sea patente a la cara del distrito de Alemania.Si Monseñor Williamson no es el único en oponerse de manera argumentada a sus proyectos peligrosos, si es el único que, valientemente,  apunta a la cabeza pensante de estos proyectos. Monseñor Tissier de Mallerais y Monseñor de Galarreta se han contentado al contradecir y refutar la política y las doctrinas erróneas de Menzingen pero sin nombrar a las personas responsables de esta revolución interna. Eso está bien pero es insuficiente. ¿La prueba? La entrevista reciente del padre Pfluger haciendo una profesión de fe « angelical” en cuanto a “la asistencia del Espíritu Santo para el papa y los Obispos”, ellos, para quienes la más grande tragedia de la historia de la Iglesia, a saber, el Vaticano II, después de haber sido una nueva pentecostés, se ha convertido en la brújula para la Iglesia del siglo XXI!Por lo tanto Monseñor Williamson era el único y verdadero obstáculo a sus maniobras de tal modo que fue el Contra-Notra aetate por excelencia.Monseñor Williamson continuará hablando. Monseñor Tissier de Mallerais lo hará cuando lo juzgue apropiado, y Monseñor de Galarreta lo volverá a hacer cuando haya regresado de sus ilusiones. Este último, espera poder salvar lo esencial por la primera, imperfecta y frágil condición sine que non del capítulo. El cree que eso le impedirá a la cabeza podrida de Menzingen concluir un mal acuerdo con Benedicto XVI. El no quiere resignarse todavía a ver que la unidad de la Fraternidad de Monseñor Lefebvre ya no existe. Hay dos campos irreductibles en ella, como en el Concilio: una minoría liberal, sentimental y conciliante, antes de ser conciliares; y otra minoría católica, doctrinal e intransigente. El groso de las tropas, estando muy ocupadas para darse cuenta de lo que está en juego, prefiere someterse a la autoridad. Porque hoy en día, el que gobierna la cabeza de la Fraternidad se parece más a Paulo VI lleno de contradicciones que a un Santo Pio X luminoso y firme en el combate de la fe.Padre, usted ha sido deshonesto. Deje de engañar a los sacerdotes y a los fieles. Comprenda su error, regrese a la sana política de nuestro fundador y deje de destruir la casa paterna.
Un Sacerdote del distrito, el 28 de octubre de 2012.En la fiesta de Cristo Rey.

Debo mencionar también otro artículo de prensa que aconsejo su lectura a todos los que buscas los ecos que suscita la crisis actual.

Este apareció en los “Escritos de París” en noviembre de 2012 bajo el título “el significado de la expulsión de Monseñor Williamson” firmado por Stepinac.
En sus 16 páginas, casi ha dicho todo y muy bien dicho.

Leo por ejemplo que “cuando se conoce la poderosa personalidad de este hombre de Dios que es Monseñor Williamson, quien debió extraer de los tesoros de gracia para soportar con tal humildad y por tanto tiempo la condición de recluso en la que fue confinado por Monseñor Fellay, provincial acomplejado, lenguaraz e intelectualmente mediocre pero dotado como todos los débiles de esta vindicta que hace las veces de fuerza y de autoridad”…

Y el autor concluye: “La FSSPX (…) ha traicionado su vocación (…) queda esperar que, a pesar de las humillaciones que ha sufrido, Monseñor Williamson se resuelva a tomar el relevo del fundador de su congregación”
El futuro nos dará sin duda las respuestas.